Tratamientos de fertilidad

Yo quiero ser mamá

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Del cerrado por vacaciones a la puerta abierta. De la jornada intensiva a la de siempre. De agosto a septiembre. Ya se asoma la vuelta a la rutina y otro año más, hablamos de cambios de hábitos. De nuevo, nos concedemos la oportunidad de mejorar esas pequeñas cosas de nuestro día a día que no nos terminan de convencer. Empezar de nuevo no solo es para enero. De hecho, cualquier cambio en nuestra vida, independientemente de cómo sea, puede producirse ahora o en cualquier otra fecha del calendario. Jaime quiere matricularse en el gimnasio. Su hermano también pero antes, se ha propuesto dejar de fumar y esta vez, está convencido de que lo va a lograr. María se ha apuntado a un curso de inglés porque ya no quiere dejarlo para el futuro. Y Olga solo quiere dedicarse más tiempo para ella. Pequeños propósitos que nos suenan y que se comentan en la oficina, a la vuelta de las vacaciones, mientras echamos de menos esos días en los que no había relojes, solo tiempo. Pero de repente, todos se quedan en silencio y alguien dice: yo quiero ser mamá.

¿Qué piensan los demás? ¿Qué opinarías tú?  ¿Cómo seguirías la conversación? Quizá sea el momento de entender que concebir un hijo, en ocasiones, puede ser imposible hacerlo de forma natural. Por eso, hay personas que sueñan con otro propósito:  más especial, uno de los que nos invita a un largo camino lleno de experiencias y cambios: el embarazo. Si es tu caso, en septiembre podrías intentarlo. De hecho, tienes muchas razones. Más de las que crees pero la más importante: lo de ser mamá, te lo mereces.

Tienes toda la información a tu alcance. Desde hace tiempo has visitado varias clínicas de reproducción asistida y has podido valorar sus pros y contras.  Por fin, has escogido la que te inspira más confianza. Déjanos decirte, por cierto, que si nos das la oportunidad, nosotros conseguiremos que no te arrepientas.

Llevas un estilo de vida saludable. Controlas tu peso, ya no fumas, tomas menos cafeína, practicas deporte y en tu dieta no faltan los alimentos que potencian la fertilidad. Lo tienes todo a tu favor para hacer más fácil este camino.

Es el mejor momento. Después de un verano de reflexión y de descanso, estás preparada para iniciar este proceso que supondrá un cambio en tu vida.

Tu primera visita será gratuita. Pero no solo en septiembre. Siempre realizamos una primera consulta gratuita para empezar una relación que queremos que sea de calidad y confianza. Y es que hay hábitos que mejor no cambiar sobre todo, si nos gustan los resultados que dan.

Porque crees en ti. Si otros lo han conseguido, ¿por qué tú no? En Fertilab, 9 de 10 mujeres han conseguido su sueño: el de tener su propio hijo.

Un tratamiento de fertilidad es un camino que requiere constancia y paciencia. Respira tranquila y déjate llevar, porque lo que vas a conseguir es simplemente maravilloso.

¿Por qué esperar más? En realidad, cualquier momento es idóneo para ser mamá si estás dispuesta a iniciar este camino. Solo necesitas motivación e ilusión. Imagínate dentro de unos meses, con tu pequeño en brazos. ¿No te inspira ganas de intentarlo?

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